Estos compromisos figurarán en el futuro Protocolo de Adhesión de Belgrado a Organización Mundial del Comercio (OMC). Pese a que la balanza comercial con el país balcánico continua siendo deficitaria para la UE, este nuevo acuerdo supone un gran paso que llevará a fortalecer las relaciones económicas entre la UE y Serbia.
Serbia, con una ubicación privilegiada en el corazón de los Balcanes ha experimentado un importante avance socioeconómico en los últimos años, convirtiéndose en uno de los países más interesantes de cara a la inversión y a la exportación.
El país bálcanico ha conseguido en los últimos años que los organismos internacionales le hayan apoyado con dotaciones económicas para garantizar su estabilidad y ha firmado diversos tratados con la UE, lo que hace que se abran las puertas a un mercado con más de 30 millones de consumidores.
En cuanto a las oportunidades de inversión, hay que destacar que Serbia es un mercado inmerso en una reconstrucción y las inversiones prioritarias se encuentran en sectores como medioambiente, energía, transportes, suministros de agua, infraestructuras y maquinaria industrial. Para ello se cuenta con la financiación del gobierno y las Instituciones Financieras Internacionales. Además hay otros sectores como el agrícola o el de la producción industrial que pueden ser muy rentables a la hora de invertir en el mercado balcánico.