En la apertura de la feria World Maritime Week (WMW), que se celebra en el Bilbao Exhibition Centre, el el viceconsejero de Transportes, Antonio Aiz, ha puesto de manifiesto la apuesta del Gobierno Vasco por mejorar las conexiones ferroportuarias y los centros logísticos, especialmente con Arasur, Jundiz y Pasaia-lru?n. El viceconsejero, ha puesto en valor el reciente acuerdo firmado con el ministerio, el protocolo de la encomienda de la Variante Sur Ferroviaria para mercancías, que servirá también como conexión en alta velocidad hacia el Cantábrico. “Se trata de un hito importantísimo porque la nueva conexión va a poner en relación directa al puerto de Bilbao con Europa”, ha asegurado Aiz.
Euskadi, plataforma logística multimodal
La red de infraestructuras logísticas y transportes de primer orden, “perfectamente coordinadas e interconectadas entre sí y con las grandes redes europeas” y la ubicación de Euskadi, lo convierten en una plataforma logística multimodal para el transporte de mercancías en el sudoeste de Europa. Aiz ha destacado que “el transporte constituye un elemento fundamental para el desarrollo socio-económico, el progreso, la equidad social y la mejora de la competitividad”.
Aiz ha insistido en la sostenibilidad, ya que “es responsabilidad de todos y cada uno de los agentes implicados en el transporte marítimo minimizar el impacto ambiental de dicho transporte y asumir el compromiso de aportar una contribución real y efectiva”. Los esfuerzos de los gobiernos, administraciones y demás agentes se enfocan hoy día, principalmente, en conseguir “la mayor eficacia y rapidez en el transporte con el mínimo impacto ambiental posible”.
La investigación sobre nuevos combustibles menos contaminantes, el tratamiento de residuos y de agua de lastre, optimización en el diseño de buques más eficientes, desguace responsable de unidades de flota obsoletas, junto a nuevas infraestructuras portuarias sostenibles (green ports) o la creación de autopistas del mar se presentan como claves para un desarrollo futuro sostenible. Se debe “invertir bien” y priorizar las infraestructuras de transporte más sostenibles y con mayor rentabilidad, desde la perspectiva ambiental, social y económica.